Con la de carreras que hay, y va el muy gilipollas y se me matricula en Marxismo. Ni odontólogo, ni informático, ni ingeniero, ni abogado: marxista.
Que yo le digo:
¿Pero no te das cuenta, desgraciado, de que el marxismo desapareció como hace seis mil años, y que la titulación ostenta un 99,9 % de paro?
¿Pues qué crees que me responde?
Que, indudablemente, la colonización cerebral a la que me ha sometido el sistema capitalista, imperialista y burgués me lleva a errar en el análisis de las condiciones objetivas del colapso y el derrumbe del modelo económico occidental, la inevitable revolución social que sobrevendrá, y el previsible aumento de la demanda de licenciados en su ramo.
Y claro: a mí lo de estudiar marxismo me sigue pareciendo una pérdida de tiempo, pero, ¿qué quieres que te diga?: está todo tan revuelto…
Lo peor serán las reválidas como toque un profesor trotskista...
ResponderEliminarUn abrazo.
Fernando, uno ya no sabe donde acertar. Igual se hace rico y se convierte en un capitalista que traiciona sus convicciones como tantos otros.
ResponderEliminarUn abrazo.
Hombre, Pedro, los troskistas también son marxistas... Bastará con incluir improperios contra Stalin en las respuestas y reválida aprobada.
ResponderEliminarYo creo, Nicolás, que la intención del chico es, desde el principio, esa a la que aludes.
¡Salud!